Descripción
Cuando las servimos en el restaurante siempre genera el efecto ¡oooohhhh!. Aunque parecen caramelos de anís, no lo son! Moja las toallas con agua y verás que se hinchan. Limpian todos los restos que te quedarán en las manos tras comer calsots.
Anónimo –
Una gran sorpresa. No conocía las toallitas en este formato, pero la verdad es que son muy útiles.